Los monosílabos son palabras de una sola sílaba que, según las normas ortográficas generales, no se acentúan. Pero algunos de los errores de acentuación o tildado más frecuentes se producen con este tipo de palabras ya que existen 8 excepciones de monosílabos que sí llevan tilde.
El hecho de que existan estos ocho casos especiales provoca errores tanto por exceso como por defecto. Así pues algunas personas colocan la tilde cuando no debe aparecer, o se olvidan de ella cuando sí tiene que ponerse.
Palabras monosílabas con tilde diacrítica
La causa de que existan estos monosílabos es la tilde diacrítica, es decir, aquella que sirve para distinguir entre dos palabras que se escriben igual pero tienen significados distintos.
La tilde (o acento) nos permite indicar cual de estas palabras es tónica y cual átona. Veamos cuales son y en qué casos han de usarse.
«él / el»
Es uno de los casos más comunes. Solo ha de llevar acento cuando se trata de un pronombre, por ejemplo: «Vamos a ir con él». Sin embargo, cuando su función es de artículo no debe llevar tilde: «El lunes es fiesta».
«tú / tu»
Cuando la usamos como posesivo no ha de llevar tilde, por ejemplo en la frase «Iremos en tu coche». Sin embargo debe llevarla cuando se trata de un pronombre personal «Conducirás tú».
«sí / si»
Debe ir sin acento cuando se trata de una conjunción, por ejemplo: «Vamos a ver si es verdad», o también cuando nos estamos refiriendo a la nota musical si. Sin embargo sí que ha de acentuarse cuando actúa como pronombre, adverbio o sustantivo, por ejemplo: «Sí, solo piensa en sí mismo».
«dé / de»
En este caso solo se debe acentuar cuando se trata de una forma del verbo dar, Ej: «Dile de que te dé un poco de eso». Sin embargo cuando se trata de la preposición «de» no debemos poner tilde, por ejemplo: «La casa de Antonia».
«té / te»
El único té que lleva acento es el que se bebe, es decir, que solo cuando esta palabra es un sustantivo referido a la infusión lleva acento: «Me gusta el té verde». Sin embargo cuando es un pronombre no lleva tilde: «Esta bebida te gusta».
«sé / se»
En este caso la tilde aparece solo cuando se trata de una forma del verbo ser o saber, por ejemplo: «Yo sé lo que quieres». Pero no lo lleva en ningún otro caso: «No se le nota nada».
«más / mas»
En este caso es más sencillo explicar primero el caso que no lleva tilde, es decir, cuando se trata de una conjunción que podríamos sustituir por «pero», por ejemplo: «lo llamé, mas no me respondió». En el resto de casos (adverbio, sustantivo, adjetivo…) sí que lleva tilde, por ejemplo: «Este coche me gusta más».
«mí / mi»
Debemos acentuar esta palabra cuando funciona como pronombre personal («Este libro lo quiero para mí»), y dejarla sin tilde cuando funciona como un adjetivo posesivo («El Quijote es mi libro favorito»).
Y entonces… ¿qué pasa con TI?
La palabra ti es una víctima colateral de las monosílabas diacríticas, pero básicamente debes recordar una cosa: ti nunca lleva acento.
La confusión suele venir dada por el hecho de que mi pueda llevar o no tilde diacrítica, pero en el caso de ti no existe riesgo de confusión ni necesidad de diferenciarla de una variable átona con diferente significado.
Espero que estas explicaciones te hayan servido de utilidad para conocer las excepciones de monosílabos que sí se acentúan. 😉